Los Ministros Voluntarios Llevan Alivio Humanitario a los Refugiados
- Según las Naciones Unidas más de 5,7 millones de personas han abandonado Ucrania desde finales de febrero, el 90 % son mujeres
y niños.
Durante los últimos dos meses los Ministros Voluntarios en más de una docena de naciones, desde Moldavia y Hungría hasta Italia y España, han estado reuniendo y distribuyendo suministros esenciales para ayudar a los refugiados ucranianos.
Desde el inicio de la invasión de Rusia a Ucrania a finales de febrero, más de cinco millones de personas —mayormente mujeres y niños— han abandonado Ucrania y han buscado seguridad en otros países.
De ellos, más de 500 000 personas cruzaron la frontera hacia Hungría. Para ayudar al esfuerzo humanitario, la Ministro Voluntario Timea Vojtilla y un equipo de 40 Ministros Voluntarios han estado trabajando estrechamente con iglesias y otras organizaciones afines desde febrero para llevar comida y artículos vitales a los miles de ucranianos que llegan a las ciudades y pueblos fronterizos.
En la ciudad noreste de Zahony, Timea y su equipo se pusieron directamente en contacto con el alcalde y las autoridades locales para averiguar lo que se necesitaba. Después se asociaron con la Cruz Roja para proporcionar comida para cocinar cientos de comidas calientes.
Además de entregar artículos vitales, los Ministros Voluntarios han estado manejando la logística, el transporte y albergues temporales en las ciudades fronterizas.
En el país vecino de Ucrania, Moldavia, la misión de Scientology en la capital Chisinau se convirtió en albergue para los refugiados que llegaban y un punto de distribución para artículos esenciales. Durante los últimos dos meses un equipo de staff, Ministros Voluntarios y voluntarios han estado trabajando a tiempo completo para distribuir alimentos y suministros de higiene a las miles de personas que llegan al albergue para recibir ayuda.
Una madre llamada Anna se acercó a los Ministros Voluntarios pidiendo ayuda, estaba teniendo problemas para mantener a sus tres hijos. Los Ministros Voluntarios organizaron el transporte para ella y su familia a Alemania y les proporcionaron comida y provisiones iniciales. Al día siguiente Anna se puso en contacto con los Ministros Voluntarios para hacerles saber que habían llegado seguros y que el gobierno alemán les había dado un apartamento y que sus hijos habían sido aceptados en el preescolar. También recibieron alimentos y todos los suministros que necesitaban. Agradeció a los Ministros Voluntarios por ayudarla a ella y a su familia.
Otra madre les dijo a los Ministros Voluntarios: “Decenas de miles de desafortunados refugiados ucranianos, mujeres con niños y ancianos, terminaron en un pequeño país con un corazón enorme y un alma rica: ¡Moldavia! Durante varios días estábamos en movimiento, sin la posibilidad de dormir, comer o lavar y con miedo y desconocimiento. Entonces llegamos a Moldavia. Lo primero que ves cuando cruzas la frontera es a los moldavos con sus coches y letreros: ‘Viaje gratuito a una ciudad’, ‘Ayuda’ y ‘Albergue gratis’. ¡Las personas más generosas están ayudando con lo que pueden! Esta ayuda se percibe en todas partes, en los centros de ayuda a los refugiados, en las tiendas y en las calles. La gente trae su propia ropa, juguetes de sus hijos y comida de su casa.
“Lo más importante es que esta ayuda proviene de toda la gente. Admiramos su cordialidad, generosidad y hospitalidad. Cada uno de los refugiados ucranianos agradece de todo corazón a las personas más amables de la preciosa Moldavia. Las familias de Ucrania que se quedaron en su patria y enviaron a sus hijos están rezando por ustedes y diciendo: ‘¡GRACIAS, tienen nuestra más profunda gratitud!’”.
Los Ministros Voluntarios de toda Europa siempre y en cualquier situación han estado proporcionando apoyo, demostrando que sin importar la situación, se puede hacer algo al respecto.
