Freewinds Ayuda a St. Vincent Después de las Erupciones Volcánicas
- Esta fue la primera vez en 42 años que el volcán La Soufrière en St. Vincent hizo erupción.
- Los Ministros Voluntarios de Scientology ayudaron a más de 20 000 personas en la isla de St. Vincent.
El 9 de abril, el volcán La Soufrière en la isla caribeña de St. Vincent hizo erupción, lanzando cientos de millones de toneladas de cenizas, rocas y tierra a la atmósfera. La erupción cubrió la isla en una gruesa capa de cenizas, obligó a unas 20 000 personas a evacuar sus hogares y dejó la mayor parte de la isla sin electricidad ni agua potable fresca.
El primer ministro de St. Vincent hizo un llamado de ayuda: “No somos capaces de hacer el esfuerzo humanitario, no somos capaces de hacer la recuperación, no podremos hacerlo sin la ayuda sustancial de la región y de la comunidad global. Estamos realmente en la hora final de necesidad”.
Ya que St. Vincent ha sido un puerto de escala para el Freewinds durante más de tres décadas, el Barco inmediatamente se acercó a los funcionarios y aliados en la isla para averiguar qué ayuda y suministros se necesitaban más.
Con el apoyo de una subvención de emergencia de la IAS, el Freewinds compró y envió un contenedor de unas 15 toneladas de suministros y equipo, incluyendo paquetes de higiene, mantas, pañales para bebés, respiradores y tanques de agua. Un equipo de Ministros Voluntarios veteranos de respuesta a desastres voló a la isla para distribuir los suministros y ayudar en el esfuerzo de socorro. Poco después de llegar, los VMs se reunieron con el Presidente de la Cruz Roja de St. Vincent y luego se desplegaron a las zonas rojas y naranjas —las zonas más peligrosas afectadas por el volcán— para averiguar si los residentes habían evacuado y para evaluar la magnitud del daño. Los datos que recopilaron demostraron ser invaluables, permitieron que la Cruz Roja proporcionara el socorro necesario en estas áreas.
Después de esto, los VMs visitaron las ciudades más afectadas por las erupciones, yendo de puerta en puerta para entregar agua, paquetes de higiene, mantas y herramientas para reparar hogares dañados. Dondequiera que los VMs se detuvieron, los lugareños los saludaron con elogios y les agradecieron por la ayuda y los suministros tan necesarios. Cuando un VM le dio a un niño una botella de agua, corrió por la calle gritando: “¡Soy rico! ¡Soy rico!”. Un hombre que recibió agua agradeció profusamente a los VMs y dijo que era la primera ayuda que había recibido desde la erupción del mes anterior. Además de distribuir suministros los VMs organizaron limpiezas: desde eliminar cenizas en las zanjas de drenaje para evitar inundaciones hasta limpiar los tejados de los hospitales y las salas de recuperación. Los lugareños se unieron a los VMs para ayudar en las limpiezas y pronto se convirtió en lo “que debía hacerse” mientras otros se unieron orgullosamente para ayudar. Los lugareños prometieron continuar limpiando la isla después de que los VMs se fueran.
Los VMs han distribuido 22 200 kilos de suministros vitales, han limpiado más de 52 toneladas de cenizas y han ayudado a más de 20 000 personas. La gente de St. Vincent estaba increíblemente agradecida por el Freewinds y los VMs que vinieron a ayudarlos, como dijo una mujer: “Muchas gracias por estar aquí y hacer lo que están haciendo. Que Dios los bendiga”.
